La Movilidad eléctrica sostenible se origina por la preocupación de los problemas medioambientales y sociales ocasionados por la generalización, durante la segunda mitad del siglo XX.
La finalidad de la movilidad eléctrica, es mejorar la movilidad y la calidad del aire en las ciudades. La calidad de la movilidad está directamente relacionada con la calidad de vida.
Colombia es un país líder en materia de lucha contra el cambio climático. Por esta razón el Gobierno Colombiano, recibirá una donación cercana a los 20 millones de euros con el fin apoyar el desarrollo de la movilidad eléctrica en el país.
Los recursos provienen del fondo NAMA (Nationally Adequate Mitigation Action), integrado por los gobiernos de Alemania, Reino Unido, Dinamarca y la Unión Europea. El proyecto de Movilidad Eléctrica presentado por el país, compitió con 76 propuestas de todas partes del mundo, antes de ser aprobado por NAMA.
Se espera que en el 2030 haya una circulación de aproximadamente 600.000 vehículos eléctricos en todo el país con lo cual se mejora la movilidad, la calidad de vida en las ciudades y se protege la salud de los ciudadanos.
Entre las principales ventajas de los vehículos eléctricos está el ahorro de combustible y de gastos de mantenimiento, aceites, lubricantes, etc. Pero sin duda el más acuciante es el “ahorro” de emisiones de gases y partículas contaminantes a la atmósfera.
La movilidad eléctrica desafortunadamente no es bien conocida por la mayoría de los ciudadanos. En un hecho que la movilidad eléctrica va a ocurrir, en la mayoría de los países avanza a velocidades insospechadas, por eso en la medida en que el país actúe rápidamente podrá subirse en el tren y obtener los beneficios.